miércoles, 23 de marzo de 2016

El Dorado de los colonialistas no estaba en un sitio preciso, estuvo y está esparcido en un amplio espacio con mucha diversidad biológica y cultural, con un rol importante para mitigar los efectos del cambio climático, con alto potencial para el turismo vivencial y social y,finalmente, con gran capacidad para sostener la vida.

No al arco minero. No al motor minero.


No hay comentarios:

Publicar un comentario